ACEITE DE COCO ORGÁNICO

Considerado en la tradición popular tropical como un poderoso elixir de belleza y salud, el Aceite de Coco Orgánico se obtiene exclusivamente mediante el método de prensado en frío de nueces de Coco secadas al sol sin el uso de ningún solvente químico. Ampliamente versátil, devuelve rápidamente a la piel elasticidad, luminosidad y un efecto aterciopelado. Además, es un potente activador del bronceado, otorgando a la piel un aspecto extraordinario ámbar/dorado. Fortalece, embellece y suaviza el cabello, facilita su crecimiento protegiéndolo de agentes externos. Además de sus características intrínsecas, los investigadores de Eterea Cosmética Natural han decidido enriquecerlo con Vitamina E de extracción, potenciando enormemente sus ya impresionantes propiedades. Con un aroma envolvente, una textura suave y seca, el Aceite de Coco orgánico de Eterea Cosmética Natural se convierte en un fantástico aliado de bienestar y belleza.

Reparador para cabello dañado. Mascarilla prechampú: verter la cantidad adecuada en un bol, según la longitud del cabello, humedeciéndolo por completo; aplicar con la yema de los dedos o con la ayuda de un peine en cada mechón; masajear suavemente también en el cuero cabelludo; cubrir la cabeza con un film transparente y dejar actuar el aceite durante aproximadamente 30/60 minutos; lavar el cabello como de costumbre.

Anticaspa. Tratamiento prechampú: agregar unas gotas de 'Aceite esencial de Árbol de Té' Eterea Cosmética Natural en el Aceite de Coco Orgánico, masajeando suavemente el cuero cabelludo; dejar actuar durante 15/30 minutos y lavar el cabello como de costumbre.

LindoAplicar sobre la piel húmeda o seca masajeando suavemente hasta su completa absorción.

Exposición solarSe recomienda su uso junto con una protección solar adecuada. Muy eficaz como aftersun.

A temperaturas ambientales inferiores a aproximadamente 26°C, el aceite tiende a solidificarse, acérquelo a una fuente de calor y agítelo antes de usarlo.

Aceite de Cocos Nucifera*, Tocoferol.

De agricultura orgánica