El aceite esencial de romero se extrae de las ramitas de la planta (rosmarinus officinalis). Su fragancia inconfundible hace que este aceite sea inmediatamente reconocible. Se usa para hacer masajes drenantes y relajantes. Tiene propiedades dermopurificantes y astringentes, por lo que puede ser añadido (son suficientes una o dos gotas) dentro de cremas, champús o geles de baño en casos de piel impura, grasa o con tendencia acneica. Si se inserta dentro de un difusor de ambiente o un quemador de esencias proporciona una sensación de relajación, mejorando al mismo tiempo la concentración. Se recomienda aplicarlo diluido utilizando un aceite portador, o mezclando algunas gotas con otras formulaciones.